ANESAR reclama que todos los puntos de venta físicos de los operadores públicos SELAE y ONCE tengan los mismos controles de acceso que los establecimientos de juego de titularidad privada
Desde ANESAR reclamamos “que todos los puntos de venta físicos de los operadores públicos SELAE y ONCE cuenten con idénticos controles de acceso con que ya cuentan los establecimientos de juego de titularidad privada, de tal manera que se deba comprobar siempre y previo al acceso al juego la edad de los participantes y su no inclusión en los registros de interdicción de acceso al juego”. Asimismo, consideramos que “resulta necesario establecer un sistema de inspección para su comprobación, así como que el incumplimiento de estas obligaciones conlleve las mismas consecuencias para los titulares de establecimientos de gestión privada”.
Esta solicitud la hemos hecho mediante una alegación al “proyecto de resolución de la Dirección General de Ordenación del Juego, por la que se establecen requisitos para la comercialización de juegos de loterías por entidades colaboradoras en la comercialización de estos productos y por páginas web, aplicaciones u otros canales electrónicos, informáticos, telemáticos o interactivos de los puntos de venta que forman parte de la red externa de los operadores habilitados”.
En el escrito, dirigido al Ministerio de Consumo, nuestro presidente, José Vall, remarca que “la declaración y reconocimiento expreso de los efectos perniciosos que los juegos reservados (juegos de gestión pública y los de la ONCE) pueden provocar en las personas, adquiere, por novedosa, una gran relevancia”. “Debemos celebrar esta toma en conciencia puesto que, si se pueden derivar una serie de efectos perniciosos de la relación de algunas personas con el juego, cabe predicarlo exactamente igual de cualquier tipo de juego con independencia de su titularidad, cuestión que hasta ahora parecía cuestionada”, añade.